Hoy es un día super especial, es tan especial cómo lo eres tú.
Si así cómo lo leíste, es un día que es extraordinario y único, nunca más vas a vivir lo que hoy vas a vivir, porque está en tu presente y es solo ahí que todo kse vive de manera especial.
Resulta que eso a veces no nos lo creemos y menos lo hacemos posible y ¿sabes por qué sucede eso? Nos desvivimos poniento todas nuestras fuerzas en lograr tener una estima alta, y no nos damos cuenta que eso que logramos «tener» se esfuma en los tiempos.
¿Pero de qué estamos hablando? Seguro te preguntas y me dirás que estoy medio loca pero lo cierto es que veamos con cosas claras… Todo lo que «tenemos» se esfuma, como es una piel tersa, un cuerpo de determinada forma, una casa limpia, una bolsa nueva, unos pantalones justo a la medida.. Porque hay que ver aquí la realidad, al usar cada una de estas cosas se van deteriorando o aflojando como los pantalones ajustados durante el día, la tela jjde vuelve más flexible; pues así pasa con todo lo que tenemos… Con el tiempo cambia así como cambia el concepto que tú te das a ti misma cuando pones tu autoestima en eso que tienes.
¡Ah verdad! Cuando pones tu estima o valor en lo que tienes, va a tender a desaparecer pero dirás…

«No pongo mi autoestima en las cosas, porfavor eso ya es viejo», y tienes razón después de tantos cursos ya te habrás dado cuenta de eso y ahora tu estima la evalúas de acuerdo a lo que logras y haces ¿cierto?
Pues ¿qué crees? Que esa estima ¡¡También va adesaparecer!! Porque el día que tus acciones no logren lo que tu estabas esperando vas a creer que no eres suficiente y que tienes que hacer más y esooooooo es la trampa más grande en la que la psicología y las nuevas tendencias nos han echo creer, que hay que hacer para lograr ser y no va por ahí.
Hace unas semanas, en los lives de la página de Personas con amor hablamos de la diferencia entre el autoestima y el reconocimiento, hasta te mencioné los pilares del autoestima (dale aquí si quieres leerlo o escucharlo) pero déjame decirte que esos pilares no se sostienen si no comienzas con la base en la que todo se edifica que es el R E C O N O C E R T E.
¡Ajá! Y el reconocerte no es preguntarte la típica pregunta de quién soy que todo el mundo sigue investigando cómo dar una respuesta adecuada, no, no por ahí no te vayas porqué nada más te vas a revolver. RECONOCERTE es saberte única e irrepetible, saber que tienes las mismas cualidades que la mujer que está al lado de ti peroooooo que la diferencia es cómo tú las muestras frente al espejo y las das a conocer a quienes te rodean.
Reconocerte es cuando sabes que está en ti todo eso que necesitas para cumplir tu misión t lograr los anhelos de tu corazón y que si estás esperando que otros te lo reconozcan, lo que estás haciendo es dejando en manos de los demás ese concepto que sólo tú puedes dar sobre ti, es también dejar esos anhelos y sueños en manos de otras personas.
¡Ajá! Así como lo leíste, si el reconocimiento de tus cualidades y talentos no los haces personales, tampoco serán tus anhelos y sueños sino de los otros y eso no es logro por lo tanto por esa razón cuando llega alguien y te dice una sola palabra que no aporta a tu estima, al valor que tu te estabas dando todo se desploma.
¿Qué qué? Pues para que quede aún más claro la importancia de esforzarte más en el reconocimiento que en el autoestima, te invito a que veas esta cápsula que me invitaron a participar en la Diócesis de Cuautitlán y Radio San Juanico
Un comentario en “Eres importante, ¿te reconoces?”