6 principios que son legado divino

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Puedes escucharlo si no quieres leer:

Ahora todos hablan de sacrificio, del dolor de María, de la traición de Judas el amigo de Jesús de Nazareth y de la persecución que hicieron los fariseos por el miedo a enfrentar los nuevos paradigmas que ofrecía Jesús.

Y parece que la escasez y todo lo que hacemos malo o se hizo en el pasado es lo que nos va a decir como ser felices y el camino.

Sin embargo dejar nuestra atención ahí es como cuando dejamos nuestra atención en las faltas de los hijos, la traición a los acuerdos firmados en el matrimonio o las múltiples veces que mostramos a la Fiona, a esa mamá y esposa fea y regañona.

Dejar de enfocarte en los éxitos y el aprendizaje por querer evaluar los daños no aporta plenitud ni una Buena Nueva.

Asi que si bien está en recordar lo que sucedió, la abundancia de este tiempo

Litúrgico para varias religiones está en las enseñanzas de Jesús que son vastas y profundas, pero 6 de las más destacadas podrían ser:

Amor:

Jesus siempre hablaba del amor, pero su enfoque partía del amor a su Padre, a Dios y entonces desde ahí es que explicaba que podíamos amar a los demás tanto como nos amáramos a nosotras mismas.

Justo de esta última parte, amarnos a nosotras mismas comienza por reencontrarte con tu feminidad y para ello puedes tomar el curso gratuito (entra en la imagen)

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Compasión:

Jesús nos enseñó a practicar la compasión, a sentir empatía por los demás y a actuar con bondad y comprensión. Su ejemplo nos desafía a mostrar compasión incluso hacia aquellos que nos han hecho daño, recordándonos que todos somos dignos de amor y perdón. Él no se dedicaba a decirles a todos que eran pecadores y se iban a condenar, al contrario se dedicó a enseñar a que descubriran en si mismos su capacidad de amar, no culpaba lo culpaban que era otra cosa muy distinta.

Como mamá y esposa tienes todos los días la opción de ser como los fariseos o de practicar lo que Jesús quizo que aprendiéramos todos porque fue su legado del amor lo que lo hizo tan famoso ¡eh! No su sufrimiento, bueno hay unos que todavía siguen con esas ideas, y cada quien pone su mirada donde quiere…

Bueno vamos al ejemplo para que si quieres lo apliques:

Puedes expresar amor y compasión hacia tu pareja y tus hijos de diversas maneras, como preparar comidas nutritivas con amor, ofrecer palabras de aliento y apoyo en momentos difíciles, y pasar tiempo de calidad juntos haciendo actividades que disfruten en familia. También puedes fomentar un ambiente de compasión y empatía al enseñar a tus hijos a tratar a los demás con amabilidad y respeto, independientemente de las diferencias que puedan tener y si eso lo haces con tu esposo el ejemplo que les vas a dar será un legado de amor.

Perdón:

Jesús promovió el perdón hacia los demás como un acto de liberación y sanación. Nos enseñó que el perdón no solo beneficia al que lo recibe, sino también al que lo otorga, liberándonos del peso del resentimiento y abriendo el camino hacia la reconciliación y la paz interior.

A poco no sentirías más paz en tu corazón ¿si tu mirada al llegar tu esposo fuera de amor? Es más puedo asegurarte que si pusieras tu mirada en sus cualidades en lugar de sus defectos sentirías hasta un gran deseo de abrazarlo.

Muchas veces el perdón no radica en lo que los demás hacen o dejan de hacer sino en nuestra capacidad de verlos desde una perspectiva más bondadosa, más amorosa; porque decir que amas a tu esposo o hijos pero vivir siempre esperando que te pidan perdón por los errores no va a hacer que tu vida futura sea próspera.

El perdón es más o menos como lo que hizo Jesús con aquella mujer adúltera que le dijo, “nadie te condena, levántate y no peques más”, y si nos vamos a la balanza pues echar culpas y recriminaciones lo hacían los fariseos otra vez, no Jesús.

Y si se te hace difícil el dejar atrás y perdonar, quizá sea más sencillo si comienzas a generar en ti las 4 hormonas que te harán más amorosa.

Humildad:

Jesús nos enseñó el valor de la humildad al mostrar un ejemplo de servicio desinteresado. Al lavar los pies de sus discípulos, nos recordó que el verdadero liderazgo se encuentra en el servicio a los demás. Nos llamó a renunciar al orgullo y la vanidad, y a adoptar una actitud de humildad y servicio hacia nuestros semejantes.

Hasta se dejó apresar sin mostrar resistencia, aunque para Él era más que claro el camino del amor y cómo lograr la reconciliación.

Muchas veces caemos en la desesperación del cansancio y comenzamos a pretender justicia y que nuestra pareja o hijos reconozcan lo que hacemos y nuestro ego necesita alimento, sin darnos cuenta que la humildad podría implicar compartir las responsabilidades del hogar de manera equitativa y alentar a todos los miembros de la familia a contribuir según sus habilidades y capacidades, si esto lo haces a través del Ubuntu, donde lo que haces impacta en los demás, está enseñanza de Jesús habrá cobrado vida en ti.

Lee la estrategia Ubuntu en la revista Enfoque Familiar “Trabajo en equipo” AQUÍ

Reconciliación:

La reconciliación fue una parte central del mensaje de Jesús, quien nos instó a buscar la restauración de las relaciones rotas. En lugar de buscar venganza o resentimiento, Jesús nos desafió a buscar la reconciliación con aquellos que nos han herido, creando así un camino hacia la unidad y la armonía.

Que yo sepa, quizá no me he enterado de lo contrario, Jesús nunca dijo que si alguien te lastimaba lo abandonaras o que si sacaba su Chewbacca (su pero versión) lo condenaras y acusarás… Él nos enseñó a unirnos y buscar el cómo si de las relaciones, que eso seguramente se lo enseñó su mamá María porque ella ha dicho el si más poderoso de la humanidad.

Si surge un conflicto en la familia, la ama de casa puede practicar el perdón al disculparse sinceramente si ha cometido un error y al perdonar a su pareja o hijos si ellos lo han hecho. Pueden sentarse juntos para hablar sobre lo sucedido, expresar sus sentimientos de manera abierta sin culpar a nadie y buscar soluciones para reconciliarse y restaurar la armonía en el hogar.

Para lograr esto te recomiendo que hagas el curso de “Cambiar la relación no de relación” (entra en la imagen, es gratuito)

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Servicio:

El servicio fue una parte integral del ministerio de Jesús, quien nos mostró que el mayor en el reino de los cielos es aquel que sirve a los demás. Nos desafió a seguir su ejemplo, buscando oportunidades para servir a los necesitados y brindar apoyo a quienes lo necesitan. Al practicar el servicio desinteresado, honramos el llamado de Jesús a amar y servir a nuestros prójimos y déjame darte esta noticia…

¡Tu esposo y tus hijos son tus primeros prójimos! Están en tu camino, tan cerca que a veces te desenfocas y no los ves.

Las mamás solemos enfocarnos en dar muchos servicios hacia el entorno de nuestros hijos o del esposo, que el partido de fut llevas las naranjas o la cena con el jefe o subordinados del marido pero también está el servicio adentro de la familia.

La presencia de mamá que escucha, que cree en sus cualidades y sus capacidades, que te dice que puedes lograr lo que te propongas .

Y el servicio de la esposa que voltea a ver a su marido con una sonrisa, que le hace cariños, esa esposa que se arregla para ser vista y esa esposa que hace sentir al marido que hay alguien esperándolo para darle un abrazo, ¡eso también es servicio!

La práctica de estas seis acciones – amor, compasión, perdón, reconciliación, humildad y servicio – puede transformar profundamente las relaciones familiares y fortalecer los lazos entre los miembros del hogar. Al implementar estas enseñanzas de Jesús en la vida diaria, esa mamá y esposa (lo puse en negritas porque luego lo olvidan) puede cultivar un ambiente de amor incondicional, comprensión mutua y apoyo mutuo en su hogar.

Esto no solo promueve la armonía y la felicidad en la familia, sino que también refleja los valores espirituales fundamentales que sustentan una vida significativa y satisfactoria, es hacer vida el comienzo del reino de Dios que Jesús quizo mostrar.

Yo le digo que es vivir en el sueño de Dios y no se tú pero para mi si es uno de mis ideales.

¡Gracias por ser parte de esta cadena de apoyo y crecimiento!

Karla Maldonado C
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